Enjuagues de agua con sal marina para beneficio de tu salud bucal

El 20 de marzo de cada año se celebra el Día Mundial de la Salud Bucodental, una efeméride promovida por la Federación Dental Internacional (FDI) para concienciar sobre la importancia de mantener una buena higiene bucal, promover hábitos saludables y dar a conocer los factores de riesgo que pueden provocar problemas de salud en la boca y los dientes.

En este mismo espacio ya hemos hablado largo y tendido sobre los beneficios del uso de la sal marina para la salud; un uso de la sal, el medicinal, que se remonta siglos y siglos atrás en la historia, especialmente por su poder para desinfectar y cicatrizar heridas. En ese sentido, y aprovechando la efeméride, hemos querido traer a primer plano uno de los usos probados y contrastados de la sal marina en materia de salud Bucodental: su utilización como enjuague bucal con dos fines muy concretos.

Por un lado, para acelerar el proceso de curación y recuperación de las úlceras bucales. Así lo reafirmaba un artículo científico publicado en la revista PLOS ONE, según el cual enjugarse la boca con una mezcla de agua y sal marina -gracias al cloruro de sodio (NaCl) presente en la sal-, además de promover unas encías más sanas, contribuía a hacer más rápido y llevadero el proceso de recuperación de las úlceras bucales.

Por otro lado, para proteger el esmalte dental. Así lo corroboró un estudio publicado en el Journal of Indian Society of Pedodontics Preventive Dentistry según el cual el agua con sal tiene la capacidad de reducir de forma efectiva la placa que se forma sobre el esmalte de los dientes al tomar alimentos o bebidas azucaradas y que tiene potencial para atacar a ese esmalte e, incluso, para provocar la inflamación de las encías. Según concluyeron los autores del estudio, el agua con sal marina “es un buen complemento para el control rutinario mecánico de la placa dental y para la prevención de enfermedades bucales”.

Cómo hacer el enjuague de agua con sal marina

Como explican los autores del estudio sobre la capacidad del agua con sal marina para acelerar el proceso de curación y recuperación de las úlceras bucales, ese poder depende en gran medida de que la cantidad de sal disuelta en el agua no sea excesiva, ya que de lo contrario el efecto del enjuague es menor e, incluso, puede llegar a ser contraproducente.

En ese sentido, la recomendación para hacer el enjuague es llenar una taza de agua tibia con media cucharadita de sal marina y enjuagarse la boca con la mezcla durante un minuto aproximadamente. Cabe recordar que, pese a los beneficios ya citados que tiene el enjuague, éste no puede ni debe sustituir en ningún caso una correcta higiene dental, que pasa necesariamente por cepillarse los dientes después de las comidas.