Cómo eliminar con sal marina los malos olores de los zapatos

Se estima que en nuestros pies se cuentan aproximadamente un cuarto de millón de glándulas sudoríparas, así que no es extraño que nuestros pies sean una de las partes del cuerpo que sudan con más facilidad cuando hace calor, hacemos ejercicio físico o, incluso, cuando experimentamos estrés. Esa tendencia al sudor puede incrementarse, además, en función del calzado que utilicemos, ya que hay zapatillas y zapatos que impiden la transpiración del pie y, por tanto, se convierten en un ecosistema ideal para el desarrollo de bacterias y hongos, responsables últimas del desagradable “olor a pies”.

Aunque como siempre en estos casos la premisa fundamental es mantener una buena higiene de los pies para intentar en la medida de lo posible reducir la aparición de estos microorganismos generados por el sudor y la humedad, hay veces en las que esta higiene no es suficiente, como tampoco lo es airear las zapatillas después de cada uso.

En estos casos, como ya sabéis, existen en farmacias y parafarmacias una serie de productos que ayudan a mantener a raya el mal olor de pies, pero nosotros os queremos hablar hoy de un método sencillo y barato con sal marina que es una alternativa muy efectiva y eficaz para eliminar el mal olor de los zapatos.

Y no decimos lo de sencillo gratuitamente, sino porque realmente lo es. La prueba es que solo necesitas dos ingredientes muy fáciles de conseguir en cualquier cocina que se tercie: sal marina y almidón de maíz (maicena).  Con una pequeña cantidad de ambos productos vas a conseguir una mezcla potentísima que absorberá la humedad de los zapatos y, con ello, eliminará de golpe el mal olor. Cabe recordar que, gracias a su contenido en magnesio, la sal marina es una sustancia con capacidad para atraer el agua y, por tanto, absorber la humedad del medio. Por eso, entre otras razones, se utiliza frecuentemente en los procesos de secado de alimentos. Y también, por ejemplo, para eliminar la humedad de los armarios.

Cómo eliminar con sal marina los malos olores de los zapatos

En realidad, bastaría con espolvorear un poco de sal marina y maicena en el interior de tus zapatos, pero nosotros te proponemos poner un puñadito de sal marina y otro de maicena en un pañuelo de algodón y luego cerrarlo como si fuese una bolsita.

Haz una “bolsita” para cada zapato, colócalas en su interior y déjalas actuar durante toda la noche para que la sal tenga tiempo de absorber la humedad del interior del calzado. ¿Notas la diferencia? Si además de que dejen de oler mal, quieres que tus zapatos huelan mejor, puedes añadir a la mezcla unas gotitas del aceite esencial que más te guste. Así de sencillo, rápido y barato.