16 de enero: las croquetas también tienen su Día Internacional

El 16 de enero podría ser un día cualquiera si no fuese porque se celebra una efeméride muy especial, el Día Internacional de la Croqueta. El por qué la croqueta tiene un Día Internacional es un misterio, pero en este mundo en el que todo se celebra y todo tiene su día Internacional o Mundial no es cuestión de ponernos exquisitos con un manjar tan versátil, que acepta tan bien la sal marina y que no conoce fronteras como las croquetas.

Historia de las croquetas

En Francia se encuentra el origen de estos deliciosos alimentos. Y en el francés, por supuesto, encuentra también su origen etimológico la palabra, que debe su nombre a una onomatopeya (“croc”) que reproduce el sonido que produce un alimento crujiente cuando lo mordemos y partimos con los dientes. Croqueta viene exactamente del francés croquette, deverbal diminutivo de croquer, cuyo significado es crujir o cuscurrear.

Hay más controversia respecto al invento de la croqueta. Los hay que lo sitúan en los comienzos del siglo XVII y otorgan su autoría al cocinero de la corte del rey de Francia y de Navarra Luis XIV, el Rey Sol. Para otros su origen es más reciente (finales del siglo XIX) y su inventor sería el considerado como padre de la cocina clásica, Monsieur Escoffier. Sea como sea, el primer registro histórico de la croqueta (o de algo parecido a la croqueta si el invento se atribuye a Escoffier) está fechado el 18 de enero de 1817 específicamente el día 18 de enero. Cuando el gastrónomo, cocinero y arquitecto francés Marie-Antoine Carême, conocido como el cocinero de los reyes, presentó un plato de croquetas en un banquete preparado para el Gran Duque Nicolás de Rusia.

Unas croquetas de brócoli para celebrar la efeméride

Hay miles y miles de recetas de croquetas en la red. Desde las más clásicas de pollo o jamón hasta las más extravagantes e innovadoras. Todo queda bien en una croqueta. Por eso, fuese quien fuese su inventor, tenemos que estarle agradecidos por los siglos de los siglos.  Nosotros para celebrar la efeméride hemos elegido unas croquetas de brócoli, puerro y cebolla que hemos encontrado en la web de Marujismo.com. Sanas y deliciosas a más no poder.

Ingredientes al alcance de todos: un brócoli, un puerro y una cebolla; tres-cuatro cucharadas de harina de trigo integral, medio litro de leche de vaca, pan rallado, tres huevos, aceite de oliva virgen extra, sal marina (¿Cómo no?) y nuez moscada.

¿Cómo hacerlas? Muy sencillo: Primero cocinamos el brócoli al vapor (no más de cuatro o cinco minutos) y, a la vez, pochamos en una sartén la cebolla y el puerro con un poco de aceite de oliva virgen extra y un aderezo de sal marina. Cuando estén pochados, juntamos con el brócoli y trituramos. Reservamos.

Ahora toca ponerse con la bechamel. En un cazo ponemos un poco de aceite y cuando esté caliente añadimos la harina. Toca mezclar e ir añadiendo poco a poco la leche sin parar de mover en ningún momento. Añadimos también la nuez moscada y unos pellizcos de sal marina y seguimos moviendo con energía hasta conseguir una masa espesa y sin grumos. Conseguido esto, y sin retirar del fuego, añadimos las verduras que habíamos dejado en reposo y mezclamos bien. La mezcla resultante la sacamos del fuego y la ponemos en una fuente, formando una capa de unos dos centímetros de grosor. Tapamos y dejamos reposar entre dos y tres horas en la nevera. Si tenéis tiempo y podéis resistir la tentación de comeros ya las croquetas, un truco: si congeláis la masa antes de freír las croquetas no se desharán. Bajo ningún concepto.

¿Hasta aquí todo bien? Pues ya solo queda ponerse a dar forma a las croquetas, que posteriormente pasaremos por el huevo batido antes de empanar con el pan rallado. Si no podéis esperar más a comerlas, cosa que entendemos a la perfección, id calentando aceite de oliva virgen extra en una sartén y cuando esté bien caliente añadir las croquetas e id girándolas para que se vayan dorando por todos lados.

Y ahora ya solo queda una cosa: disfrutar.

¡Feliz Día Internacional de la Croqueta!