Receta refrescante de gazpacho de sandía con sal marina

A estas alturas de agosto parece que se acaba el verano, pero lo cierto es que aún nos queda casi un mes de temporada estival y al menos otro medio mes más de altas temperaturas en buena parte de España, por lo que nuestro cuerpo nos va a seguir pidiendo comidas ligeras y refrescantes con las que combatir el calor. En ese sentido, no hay comida más refrescante e icónica del verano que el gazpacho andaluz, que hoy nosotros os proponemos revisitar con una propuesta modificada con el añadido de una de las frutas emblemáticas del verano: la sandía.

Esta receta no sólo es sencilla y rápida de preparar, sino que os podemos asegurar que hace las delicias de los más pequeños de la casa. Por dos motivos: por un lado, porque la sandía es una fruta que suele encantar a los niños y las niñas. Por otro, porque gracias a su dulzura la sandía rebaja la acidez del tomate, dando al gazpacho un sabor más suave y más del agrado de los pequeños comensales.

¿Os animáis a probar nuestro gazpacho de sandía con sal marina?

Ingredientes para preparar gazpacho de sandía con sal marina

  • 500 gr de sandía, sin pepitas (peso sin piel).
  • 500 gr de tomate.
  • 1 diente de ajo.
  • 1 pimiento verde italiano.
  • ¼ de cebolleta.
  • Un chorrito de vinagre.
  • Tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
  • Una cucharadita de postre de sal marina.

Cómo preparar gazpacho de sandía con sal marina

Como hemos dicho en la introducción, hacer un gazpacho de sandía es realmente sencillo y apenas te llevará 10-15 minutos de tu tiempo.

El primer paso es cortar la sandía en trozos (sin piel) e ir pesándola hasta alcanzar los 500 gramos. A continuación, os recomendamos pelar los tomates (para evitarnos que luego haya tropezones, tan desagradables para los niños y niñas) y cortarlos en cuartos. Hacemos lo propio con el pimiento verde, que cortamos en rodajas gruesas, y con el cuarto de cebolleta tierna. Por último, pelamos el ajo

A continuación, añadimos todos los ingredientes pelados y picados en la batidora y trituramos hasta conseguir una textura líquida. Si sois de aquellos que prefieren una textura del gazpacho fina, os recomendamos colar la mezcla después de batirla y antes de servirla.

Ya casi estamos listos: es el turno de aderezar el gazpacho de sandía con el aceite de oliva virgen extra, el vinagre y la sal marina. Las cantidades que os hemos puesto son orientativas, así que empieza poco a poco, mezcla con la batidora, y luego ves añadiendo si lo ves necesario hasta conseguir el sabor deseado.

Cuando lo tengas listo, observa la textura de tu gazpacho. ¿Te gusta más líquido? Entonces sólo tienes que añadirle un poco de agua fría. ¿Te gusta más espeso? Échale un poco de pan duro y tritura de nuevo.

Cuando logres el sabor y la textura deseados, guarda el gazpacho en la nevera durante unas horitas para luego poder tomártelo bien fresquito. ¡A disfrutar!