21 Nov Cuatro variedades de sal marina gourmet para paladares exquisitos
La sal marina es pura naturaleza, como demuestra el hecho de que nuestro oro blanco sea fruto de la actuación combinada de tres elementos naturales (agua del mar, sol y viento). Esa naturaleza, unida al conocimiento acumulado durante siglos de producción y a un inquebrantable espíritu innovador, ha dado lugar a la creación de sales marinas gourmet, es decir, variedades de sal marina especialmente indicadas para paladares exquisitos que en muchas ocasiones llegan a nuestras cocinas tras triunfar previamente en restaurantes de alta cocina. En este post os presentamos con detalle cuatro variedades de sal marina gourmet. ¿Cuál es vuestra favorita?
Sal marina virgen
Según el Real Decreto 1424/1983, de 27 de abril, por el que se aprueba la Reglamentación Técnico-Sanitaria para la obtención, circulación y venta de la sal y salmueras comestibles, la sal marina es la sal “procedente de la evaporación del agua del mar. Cuando ésta se obtiene exclusivamente por la acción del viento y del sol, es recogida a mano y lavada sólo en el cristalizador, sin la adición de ningún ingrediente, se puede denominar «sal marina virgen»”. En la práctica, se conoce como sal marina virgen a la procedente de la evaporación natural del agua del mar y lavada solo con la misma agua que la produce. Esto genera una sal húmeda, con una gran presencia de oligoelementos como el yodo, el magnesio, el calcio o el hierro.
Flor de sal
La flor de sal es reconocida también, por su excelente calidad, como el caviar de las sales. Se trata de una sal gourmet que cristaliza en la superficie del agua de los cristalizadores de las salinas marinas tradicionales y que se recoge diariamente de forma manual, con ayuda de una especie de rastrillos específicos para este fin. Se recolecta principalmente en verano y a las horas de mayor insolación, es decir, de 12:00 a 18:00, ya que, después de la puesta de sol, la humedad ambiental en contacto con los cristales que flotan los deshace. El resultado son unos delicados cristales de sal de gran calidad que forman patrones que se asemejan a las flores o copos de nieve (de ahí su nombre). Su sabor y su textura la convierten en un ingrediente habitual en los mejores restaurantes del mundo.
Sal marina en escamas
La sal en escamas es una de las variedades gourmet más reconocidas y utilizadas -especialmente en restauración y repostería de vanguardia- por su singularidad y su capacidad decorativa. Las escamas son fruto de una cristalización controlada del agua del mar en la que se controlan parámetros habituales que intervienen en la formación de la sal marina como el porcentaje de humedad, la temperatura o la presión, entre otros. El resultado es una sal que tiene una peculiar forma piramidal (cada escama es una pequeña pirámide de sal). Su textura delicada y crujiente, que se nota en el paladar, deja un inconfundible toque salado y crocante de diferentes intensidades en cada bocado.
Espuma de sal
La espuma de sal marina es una de las últimas innovaciones en el ámbito de la sal marina de especialidad y ya un ingrediente consolidado en las cocinas de algunos de los mejores chefs de España. La espuma de sal marina, que sorprende por su ligera y agradable sensación en boca, se disuelve instantáneamente a la temperatura del paladar. Es una sal marina que, gracias a su baja densidad, resulta increíblemente ligera y presenta una textura única. Esta innovación, que presenta una apariencia similar a la ya citada flora de sal, tiene menor densidad debido a su grano hueco y de aspecto esponjoso.